Bilbao volverá a acoger este verano la gran fiesta internacional del blues
La gran fiesta del blues regresará este verano a la Villa con una programación gratuita repleta de primeras figuras del género y actividades para todos los públicos que se desarrollarán en el Arenal como escenario principal.
Tras el éxito del pasado año, el Ayuntamiento de Bilbao vuelve a impulsar, del 28 al 30 de julio, este festival internacional que ofrecerá, como en su primera edición, conciertos gratuitos a pie de calle y para todas las edades en el Arenal como escenario principal aunque se extenderá a otros rincones de la ciudad.
El Festival reunió el año pasado a más de 65.000 personas que disfrutaron, cantaron y bailaron a ritmo del mejor blues en los conciertos de artistas de primera línea como Bob Stroger y la Chicago All Stars, Shemekia Copeland, Alejo Stivel, Ronnie Baker Brooks, Dana Fuchs, Fantastic Negrito, Wax & Boogie feat Drew Davies, Noa & The Hell Drinkers, Blues Triumvirate, Flamingo Tours, Travellin’ Brothers y Micky & The Buzz. El broche final lo pusieron Fito y Mikel Erentxun como artistas invitados.
A esta cifra se sumó el excelente balance en el resto de actividades, como las actuaciones del Kiosko del Arenal, las clases de boogie-woogie y el pasacalles de la dixie band “Granujas a todo ritmo’’.
El certamen, único en Euskadi, inundó el Arenal bilbaíno de miles de seguidores y seguidoras procedentes de distintos puntos del mundo como Canadá, Suiza o Alemania, público local, así como turistas que se sumaron a una propuesta en la que la calidad de la bandas y artistas y el buen ambiente fueron la tónica general.
Cartel de 2023
El cartel de la segunda edición de Bilbao Blues Festival, homenajea en esta ocasión a las voces femeninas y subraya la vinculación de este gran evento musical con la esencia de la capital vizcaína a través de uno de sus dulces más tradicionales: las Carolinas.
La ilustración es obra del estudio vasco Moriskette, dirigido por Sergio Pérez Berasategi, que también firmó la imagen de 2022, protagonizada por un bluesman y otro icono bilbaíno: sus características baldosas.
“Tuvimos muy claro desde el principio que necesitábamos crear una imagen coherente con la de la pasada edición, pero que, a su vez, fuera diferenciadora. Todo esto, unido al compromiso que la organización ha manifestado siempre a favor de la igualdad, nos invitaba a utilizar esta vez una figura femenina como protagonista”, explica Pérez Berasategi. El diseñador también señala quiso buscar otro elemento visual que conectara la imagen del Blues con la esencia de la ciudad, donde el elegido fue la Carolina.