El funicular de Artxanda reducirá el consumo energético con 220 nuevas placas solares
El Funicular de Artxanda sigue avanzando en el proceso de renovación de sus instalaciones con la entrada en funcionamiento de 220 placas solares y la construcción de un jardín vertical en la fachada de la estación inferior.
La Concejala de Movilidad y Sostenibilidad, Nora Abete, ha presentado el jardín vertical en el que se han plantado 12 especies distintas de plantas capaces de absorber 15,25 toneladas de CO2 al año, y que se enmarca en el eje de creación de corredores verdes en la ciudad, conectando los diferentes niveles entre Castaños y Matiko con un elemento de vegetación natural e incrementando la superficie verde de la zona, con la siguiente mejora de la calidad del aire, aumento de la biodiversidad y mejora estética de la plaza.
También se han instalado 220 placas de energía fotovoltaica que, junto con el aprovechamiento de la energía generada por la frenada de los coches, permitirá ahorrar un 80% del consumo energético anual de las instalaciones, lo que equivale a más de 50.000 kg de CO2 que se evita emitir a la atmósfera cada año. Con la ampliación de la instalación de placas solares, de 145.000 kw, se podrá cubrir hasta el 30% del consumo energético de los ascensores, equivalente a 540.000 kw al año.
Proyecto de reforma
Estos dos proyectos buscan convertir a este popular medio de transporte en un funicular de tercera generación para el siglo XXI, que sea capaz de dar respuesta a la tasa de crecimiento actual y la prevista con el desarrollo del Monte Artxanda. De hecho, el Funicular además de un medio de transporte utilizado en el día a día de miles de bilbainas y bilbainos, se encuentra entre los principales atractivos turísticos de la ciudad. Además, forman parte de un proceso mucho más amplio que también incluye la rehabilitación de la estación superior, cuyas obras comenzarán este mismo año, y la futura renovación de los vagones.
Precisamente, Nora Abete ha presentado también esta mañana el diseño de la reforma completa que se acometerá de la estación superior para modernizar las instalaciones, de forma que sean más funcionales y atractivas para las personas usuarias, al tiempo que serán más operativas y eficientes energéticamente.
La rehabilitación se sustanciará en la transformación de la zona pública del edificio de la estación superior, consiguiendo una estación moderna y funcional acorde a las nuevas necesidades del transporte y la accesibilidad. Contempla asimismo la mejora de la operativa mediante la instalación de puertas canceladoras, validadoras, salas de espera, etc., así como la instalación de zonas de comercio de conveniencia y merchandising dentro de la estación.
También se ha hecho público el proyecto ganador del diseño de los futuros nuevos vagones, que permitirá que aumenten su capacidad, ser más confortable y con mayor luminosidad, y adaptarse a la creciente demanda (se espera que en 2023 se vuelva a superar el millón de personas usuarias que se alcanzó en 2019).
Con este objetivo actualmente se está realizando un estudio que permitirá determinar el aumento de la capacidad de los vagones con la condición de mantener la actual potencia motriz de la maquinaria de tracción. Se está valorando un aumento de un mínimo de 20 y un máximo de 55 pasajeros más en cada vagón.