Las mejores esculturas callejeras de Bilbao: recorrido por el arte urbano
Descubre el encanto artístico de Bilbao a través de sus impresionantes esculturas callejeras
Bilbao, una ciudad conocida por su rica historia y su gran escena artística, cuenta con una destacada colección de esculturas callejeras que deleitan a locales y visitantes por igual. Estas obras de arte al aire libre, dispersas por toda la ciudad, capturan la esencia bilbaína y reflejan su identidad cultural única.
Desde monumentos históricos hasta obras contemporáneas, la ciudad vasca alberga una amplia variedad de creaciones artísticas que embellecen sus calles y plazas. En este artículo, te llevaremos en un recorrido por las mejores esculturas urbanas de Bilbao, explorando su significado, belleza y contribución al paisaje cultural de la ciudad.
- “Don Diego López de Haro” de Mariano Benlliure y Gil
- "Puppy" de Jeff Koons
- "Maman" de Louise Bourgeois
- "El Arquero" de Jorge Oteiza
- “Huella Dactilar” de Juan José Novella
- “Las Sirgueras” de Dora Salazar
- “Grúa Carola” de Arturo Llorente Bodegas
- “Variante Ovoide” de Jorge Oteiza
- “Tulipanes” de Jeff Koons
- “Terpsícore, la musa de la danza" de Salvador Dalí
“Don Diego López de Haro” de Mariano Benlliure y Gil
Es la primera escultura pública de Bilbao, creada en 1890, representa al fundador de la Villa de Bilbao en el año 1300. La estatua Don Diego López de Haro, de 4 metros de altura, está hecha de bronce y descansa sobre una columna y una base de mármol de Ereño. Su significado radica en honrar al fundador de la ciudad y su mirada hacia el Casco Viejo simboliza el lugar donde se originó Bilbao.
"Puppy" de Jeff Koons
Puppy es una de las esculturas más emblemáticas y famosas de la ciudad vasca. Ubicada en la entrada del Museo Guggenheim, esta enorme escultura en forma de cachorro recubierto de flores es un símbolo icónico de la ciudad y se ha convertido en una parada obligatoria para los amantes del arte.
"Maman" de Louise Bourgeois
Otra obra de arte destacada, es una impresionante escultura de una araña gigante diseñada por Bourgeois. Situada junto al Museo Guggenheim, esta escultura de acero inoxidable, bronce y mármoles, es una representación poderosa de la maternidad y la protección.
"El Arquero" de Jorge Oteiza
En el Casco Viejo de Bilbao nos encontramos con la escultura. Esta obra moderna es un homenaje al deporte de la pelota vasca y representa a un pelotari en pleno movimiento, capturando la energía y la pasión de este deporte tradicional.
“Huella Dactilar” de Juan José Novella
La Huella es una escultura ubicada en el monte Artxanda en Bilbao, dedicada a honrar la memoria de los combatientes vascos en la Guerra Civil. Representa una huella dactilar y está construida con acero al carbono. Simboliza la reflexión sobre el sinsentido de la guerra y ofrece impresionantes vistas panorámicas de Bilbao.
“Las Sirgueras” de Dora Salazar
El monumento a las Sirgueras, ubicado en el Paseo de Uribitarte de Bilbao, son unas escultura de bronce que representan a cuatro mujeres tirando de una sirga. Rinde homenaje a las mujeres que realizaban este arduo trabajo en el siglo XIX. Simboliza la lucha por la igualdad y el reconocimiento de su labor históricamente explotada.
“Grúa Carola” de Arturo Llorente Bodegas
Es una grúa cigüeña de sesenta metros de altura. Fue una máquina elevadora poderosa utilizada en los astilleros de la ciudad. Su nombre se debe a una mujer llamada Carol Iglesias. Actualmente, la Grúa Carola forma parte del museo Itsasmuseum y representa el pasado industrial y marítimo de Bilbao. Está construida con acero y es un símbolo de la transformación de la ciudad.
“Variante Ovoide” de Jorge Oteiza
Es una escultura ubicada en el Paseo del Campo Volantín en Bilbao. Representa el resultado de la desocupación de una esfera. Construida con acero cortén, evoca los barcos que navegaban por la ría de Bilbao y recupera la estética geométrica europea.
“Tulipanes” de Jeff Koons
Está ubicada junto al estanque del Museo Guggenheim Bilbao. Los Tulipanes representan globos de colores gigantes inspirados en fiestas y celebraciones. Construida con acero inoxidable brillante, la obra simboliza la alegría y la transformación de objetos comunes en algo deslumbrante y simbólico.
“Terpsícore, la musa de la danza" de Salvador Dalí
Ubicada en el estanque del Palacio Euskalduna en Bilbao, representa a la musa de la danza de la mitología griega, con una figura sin cabeza y brazos alzados. Simboliza la victoria de la danza y la expresión artística sobre los mortales. Está construida a partir de un molde creado por Dalí en 1971 y es la única escultura de este tipo en Europa.
Estas son solo algunas de las muchas esculturas callejeras que embellecen las calles de la ciudad. Cada una de ellas cuenta una historia única y contribuye al rico patrimonio artístico de la ciudad. Explorar estas obras maestras al aire libre es una manera maravillosa de conocer la cultura y el arte de Bilbao mientras se disfruta de un agradable paseo por sus calles.