Hallada en Begoña la mayor fosa común de la Guerra Civil exhumada en Euskadi
El proyecto ‘Begoñako Argia’, que la Sociedad de Ciencias Aranzadi está llevando a cabo con la subvención del Ayuntamiento de Bilbao, arrancó el pasado mes de octubre. Desde entonces, el equipo de Aranzadi y los jóvenes estudiantes que forman parte del campus de prácticas establecido en el Cementerio de Begoña han exhumado los restos de más de 2.200 personas.
Fruto de esos trabajos y la documentación previa, era conocida la existencia en Begoña de restos de personas cuyos fallecimientos se situaban en el contexto de la Guerra Civil, y que algunos de ellos ya habían sido exhumados. La mayoría se correspondían con enterramientos individualizados y todos aparecían documentados en el registro cementerial. Sin embargo, se ha hallado una gran fosa común de la época de la que no se tenía noticia. En esa fosa, dividida en cuatro partes contiguas, se han encontrado hasta 46 individuos y multitud de objetos. Se trata, por tanto, de la mayor fosa común de la Guerra Civil hallada en Euskadi hasta la fecha.
Según la documentación existente, al menos, 55 víctimas de la Guerra Civil fueron inhumadas en el Cementerio de Begoña. La mayor parte se corresponden con soldados jóvenes provenientes del frente de guerra, víctimas mortales de los bombardeos sufridos en Bilbao y algunas ejecuciones. Y se hace mención también a una pequeña fosa común.
De ellas, nueve individuos ya fueron exhumados y trasladados a otros cementerio por sus familias en años anteriores. Por tanto, al comienzo del proyecto ‘Begoñako Argia’ había constancia de la existencia de los restos de 46 víctimas mortales. A las que habría que sumar siete más que no aparecen en el registro cementerial pero sí constan en la base de datos de víctimas mortales de la Guerra Civil en Euskadi, que maneja Gogora.
Los restos de las víctimas mortales se inhumaron en diferentes puntos del cementerio, algunos en panteones, pero la mayoría en tumbas de suelo. Casi todos en la zona de Santa Teresa.
En el marco del proyecto ‘Begoñako Argia’ y en colaboración con el Gobierno Vasco, el 4 de diciembre de 2021 se iniciaron los trabajos para recuperar los restos de esas víctimas.
En esta primera intervención se exhumaron 14 individuos: cinco víctimas mortales de los bombardeos que sufrió Bilbao y nueve gudaris y milicianos fallecidos en el frente o en hospitales militares a causa de heridas de guerra. El 29 de enero de 2022 continúan los trabajos de exhumación en una segunda zona de Santa Teresa. En esta fecha se exhuman los restos de cuatro personas más, tres gudaris y una persona fallecida a causa de bombardeo.
El pasado mes de marzo, el equipo de Aranzadi llegó a la última zona de Santa Teresa donde constan enterramientos individualizados de la Guerra Civil, y según el registro cementerial una pequeña fosa común con cuatro individuos. En este punto se han realizado doce exhumaciones de enterramientos individualizados: cinco de soldados republicanos procedentes del frente de guerra, una de un requeté procedente del frente sublevado, dos exhumaciones de víctimas mortales de bombardeos (madre e hija) y tres personas fallecidas por explosión de un obús.
Sin embargo, además de los enterramientos individualizados, en esta misma zona de Santa Teresa, se ha encontrado una gran fosa común, a la que ninguna documentación hace referencia, dividida en cuatro partes contiguas: una primera con dos individuos, una segunda con otros dos individuos, una tercera con 17 individuos y una cuarta con 25 individuos. Hacen un total de 46.
En las partes 1 y 2 de la fosa se han hallado cuatro individuos en posición decúbito supino (boca arriba), y al menos uno de ellos con signos de haber sido ejecutado. Al menos dos de ellas corresponderían a personas del bando sublevado ejecutadas por manos republicanas días antes de la toma de Bilbao por las tropas franquistas. Las partes 3 y 4 de la fosa contienen 17 y 25 cuerpos, respectivamente. Y, por las evidencias de material encontrado, todos se corresponden con soldados republicanos, tanto gudaris como milicianos. En la parte 3 todos los individuos se encontraban en posición decúbito prono (boca abajo), y en la parte 4 había individuos tanto boca arriba como boca abajo.
Se ha encontrado mucho material junto con los enterramientos: monedas, mecheros, lápices, peines, navajas, botones, botas, mucha munición y chapas y hebilla de cinturones de soldados.
A través de Gogora se va a proceder a realizar pruebas de ADN a todos los restos aparecidos.